La depreciación es un fenómeno que también afecta a los activos fijos de una empresa, y para calcular su efecto se pueden utilizar diferentes métodos. En este artículo te mostraremos dos formas de calcular tus activos fijos.
El primero es el denominado método lineal. En una fórmula fácil, se debe tomar el valor de compra del activo y restarle el valor de rescate (precio que se podría obtener una vez que llegue al fin de su vida útil). A ese resultado se le divide por la vida útil del activo (valor en unidad de tiempo), que puede ser calculada en base a expectativas. El resultado te llevará a $ X cantidad de dinero / por año. Esto determina una tasa de depreciación.
Otra forma para calcular tus activos fijos es el del doble saldo decreciente. Para ello primero se define la expectativa de vida útil del activo en relación al costo de compra. Por ejemplo, una maquinaria durará 5 años. Luego, se divide 100% por la vida útil y luego se multiplica por 2 para hallar la tasa de depreciación. Esto nos llevaría a 100 % / 5 años = 20 % y 20 % x 2 = 40 %. Finalmente se multiplica esta tasa por el valor de compra, lo que se reflejaría como $ 1000 x 40 % = $400 de depreciación por año.
Qué es un activo fijo
Por activo fijo se considera a los bienes de la empresa que no pueden convertirse en un líquido a corto plazo. Estos pueden ser tangibles o intangibles, y normalmente son necesarios para el funcionamiento de una compañía.
Los activos fijos tangibles remiten a productos materiales fáciles de identificar, pero los intangibles consideran bienes patrimoniales que no son cosas, como por ejemplo un logo, una patente, un copyright o bien otra marca que la empresa administre.
Depreciación de activos fijos
La depreciación de activos fijos da cuenta del fenómeno de pérdida de valor que sufren todos aquellos elementos o insumos considerados como activos sin fluctuación dentro de la empresa.
Para las empresas siempre es necesario adquirir diversos productos como mobiliario de oficina, computadores, vehículos o maquinarias, pero que inevitablemente se van depreciando a medida que pasa el tiempo.
La tarea de clasificar y administrar estos activos se puede apoyar en un software ERP como el de Manager Software. Algunas de estas herramientas permiten manejar adiciones, ventas o disposiciones sobre estos activos fijos, además de generar registros históricos sobre ellos.